En el caso de que encontremos al afectado con una intoxicación grave, que no pueda responder o decidir en ese momento sobre sí mismo, tendremos que hacer todo lo posible para llevarlo a un centro donde pueda realizarle una desintoxicación.
Cuando una persona decide dar el paso de entrar en el proceso de abandono de su adicción, se producen en ella diversos cambios conductuales, emocionales y físicos.
La persona en cuestión debe generar cambios en su día a día, en sus rutinas, en su entorno, experimentará diferentes emociones y su estado de ánimo variará, pero también sufrirá cambios físicos.
Ingreso en un centro de adicciones
El ingreso de un adicto sin su consentimiento es una tarea imposible, además de inútil, sobre todo cuando esperamos que se recupere por completo de su adicción. Ya sea porque ha pedido ayuda o porque le han pillado tomando o aplicando sustancias tóxicas, debemos centrarnos en echarle una mano.
Si bien podemos coaccionar al adicto de alguna manera, para convencerlo de que ingrese a un centro de adicciones, la ley no nos permite forzarlo o internarlo por la fuerza, es decir, sin su voluntad.
Los diferentes centros de desintoxicación públicos y privados
En Valencia disponemos de diferentes recursos hospitalarios de desintoxicación, tanto públicos como privados. La estructura pública (Seguridad Social) ofrece las UDH (Unidades Hospitalarias de Desintoxicación) como principal recurso para la desintoxicación de alcohol y drogas en los hospitales. Para iniciar la desintoxicación en una UDH tenemos que ser atendidos previamente por la UCA (Unidad de Conductas Adictivas) del departamento de salud correspondiente. Por tanto, lo primero que haremos para entrar será acudir al médico de familia para que nos derive a la UCA correspondiente. Las principales UDH de la ciudad de Valencia son:
- Hospital Padre Jofré. Carretera Burjassot-Torres Torres s/n. Teléfono 961699000
- Hospital General de Valencia. Avenida Tres Creus, s/n.
Teléfono 963862900
- Hospital Clínico Universitario. Avenida Blasco Ibáñez, 17. Teléfono 963862600
El destete, una carrera de fondo
Una vez superada la dependencia física, procedemos al destete, en el que claramente se diferencian dos etapas .
- La fase intensiva. Tiene una duración aproximada de 4 semanas, en las que se realizan 16 sesiones grupales a razón de 4 por semana. Estas sesiones se estructuran a modo de seminarios, en los que se trabajan diferentes aspectos relacionados con las adicciones.
- La fase de mantenimiento. Comienza al final de la fase intensiva, y tiene una duración aproximada de 24 meses. Durante esta fase se realizan sesiones de terapia de grupo una vez a la semana, en las que el paciente trabaja los cambios propuestos durante la fase intensiva así como las posibles dificultades que se presentan.
Un problema de salud
Recordemos que la Organización Mundial de la Salud clasifica la adicción como una enfermedad crónica, degenerativa y mortal. La bola siempre crece si no se cura con un tratamiento serio.
Si eres familiar de una persona que sufre adicción, existen pautas que te pueden ayudar. Estas son recomendaciones basadas en años de experiencia. La mejor ayuda que se le puede dar a un adicto es ponerle límites y forzar su ingreso a un programa de rehabilitación.
